sábado, 4 de mayo de 2013

Día Internacional del Combatiente Forestal

El 4 de mayo de cada año se le conoce como el “Día Internacional del Combatiente Forestal”, a raíz de un accidente ocurrido en diciembre de 1998, cuando 5 valientes bomberos, que pertenecían a una brigada forestal, perdieron la vida en un incendio en Linton, Canadá.

Este hecho, y reforzado con otros accidentes trágicos ocurridos durante la lucha contra los fuegos de bosques y campos a lo largo y ancho del mundo, fue el inicio de los movimientos a favor de los combatientes forestales en el ámbito internacional, en el cual se eligió el día de San Florián, considerado el Santo Patrono de los combatientes de incendios, como fecha de conmemoración. En 1999 se conmemoró por primera vez este día, en el cual se realizó un homenaje a esta legión de luchadores, que defienden los bosques del mundo de los efectos devastadores provocados por el uso inadecuado del fuego.

En nuestro país los bomberos forestales del Instituto Nacional de Parques (Inparques) y los grupos voluntarios, expresan su apoyo a la comunidad internacional y a la sociedad en general a quienes combaten los incendios forestales en todo el mundo.

Los bomberos de Inparques son el vivo ejemplo de ese compromiso, y a todos ellos se les debe reconocer su gran valentía y arduo trabajo para la reducción de las áreas afectadas por el fuego en el país, no sólo por el mejoramiento de los tiempos de respuesta ante cada eventualidad, sino por su trabajo en la prevención de estos eventos, mediante charlas de sensibilización, talleres de manejo del fuego dirigidos a las comunidades, entre otros.

Los motivos de celebración del Día Internacional del Combatiente Forestal son: expresar el apoyo de la Comunidad Internacional y de la Sociedad en general a quienes combaten los incendios forestales y de vegetación en todo el mundo, reconociendo su nivel de compromiso y dedicación. Así mismo, recordar a quienes han perdido la vida, o sufrido daños o secuelas en la lucha contra los incendios de bosques y campos, como una señal de respeto y agradecimiento hacia quienes tratan de preservar la vida y la integridad de los patrimonios y recursos naturales de los efectos de fuegos no deseados.


Lic. Daniel González
www.mundocupacional.com

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